miércoles, 17 de octubre de 2007

Cambios en mi vida

Desvestí mi cuerpo de aquella piel de reptil
y empecé a caminar. Así empieza esta historia.
Llena de momentos incomprendidos y de miedos.
De maltratos psicológicos y pervertidos.

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La primavera de un pervertido:

Necesito pasear cerca de la primavera.
Desprenderme de ésta, tu miserable vida.
Una vida encarcelada en la injusticia.
Manoseada por un ser como tú, un pervertido.

Quiero pasear por estos caminos y
desprenderme de ésta, tu piel de cocodrilo.
Quiero a través de las piedras cuchicheantes
desgarrar estos miserables tejidos.

Tanto tiempo viviendo en el infierno.
Un letargo de vida lleno de odios y miedos.
Tan vejatorias, machistas e hirientes
así fueron y seguirán siendo tus caricias.

Condenada a sentir tus miedos cercanos.
Arrastrándome por los precipicios del abismo.
Cogiendo margaritas para tu entierro.
Me ofrezco a enterrarte en mi olvido.

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Invierno frío (Sufrimientos):

El extraño que hay en ti despierta
en las noches que aparece la luna.
Hace tanto frío que me congelo.
Invierno, me imagino allí en medio.

Aún recuerdo las bofetadas que me dabas.
Ríos de color púrpura se desprendían.
Me maltratabas y arruinaste mi vida.
Ahora puedo volar como una golondrina.

Humillada y arrodillada ante tu ser.
Me estremecía a cada paso que dabas.
Sentía cuando mi ira despertaba.
Tan endeble no podía hacer nada.

Aquella piel de reptil ha desaparecido.
Cambios en mi vida, alegrada por tu ida.
Suspiros que por fin respiran.
Lágrimas jamás desprendidas.

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Soy un ser vivo, no una muñeca:

Demasiado tiempo caminando a tu lado.
Tantas horas desperdiciadas contigo.
Soy un ser vivo, no un insecto malcriado.
No soy sirviente, ni adoradora de tu mente.

Soy una belleza podrida, una flor escondida,
apresada dentro de una mente incomprendida.
No me comprendes, una gran enfermedad tienes.
Necesitas apoyo, ánimos para salir de tu hoyo.

No soy una muñeca a la cual puedes tocar,
manipular, ni magrear a tu antojo.
Necesito pasear, soñar mirando al mar.
Sentirme viva por un solo momento.

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Aprendiendo a luchar:

Parezco una serpiente de cascabel.
Soy una mujer sedienta de placer.
Esperando a mi víctima cerca.
Acércate, eres mi presa.

Ahora ya no puedes dañarme.
Ni emocionalmente ni físicamente.
He aprendido a escalar por la montaña.
Magistralmente tapando mi cara.

Ya no tengo vértigo. No me puedo caer.
Expulse tu piel acurrucada en mi ser.
La cima es el premio conseguido
a tantos años llenos de castigos.

Con fuerza de voluntad te pude estudiar.
Tanto tiempo creyendo tu sinceridad.
Injusticias que se llevó el viento.
Una vida alegre llega de nuevo.

Adiós a esta vida manchada de negro.
Bienvenida la vida llena de rojo.
El amor ha vuelto cerca de mis ojos.
La pasión fluye por todos mis poros.

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Este texto relata las pesadillas que viven miles de mujeres en todo el mundo.
Una lucha contra el maltrato, el machismo, la intolerancia, etc...

1 comentario:

maggie dijo...

Dejaré en este poema mi sentir muy profundo por la temática tan escalofriante y tan actual. Contenido que me identifica plenamente y que está narrado con tal delicadeza que sería capaz de leerlo una y otra vez y aunque las lágrimas afloren, no me siento masoquista, solo disfruto de la belleza literaria. Felicitaciones amigo... Maggie