lunes, 12 de noviembre de 2007

Más allá del horizonte

Más allá del horizonte emerge mi tierra.
Hace poco podía distinguir su fragancia.
El mar quedaba a un lado; ya no existe.
Su vida poco a poco se fue apagando.

Tiempos ingratos llegan a esta vida.
Es el canto del fuego el que renace.
Son las llamas que ocultan mi alma.

En el lugar del mar se puede admirar
un desierto lleno de soledad.
Los seres vivos ahogaron sus penas
en un manto cubierto de arena.

Es mi vida perdida la que vengo a buscar.
En la eternidad me paro a contemplar
un desierto que navega con frialdad.

Con mi caballo sediento de sed
voy cabalgando por el amanecer.
Con una espada a mi espalda
un castillo aguarda mi llegada.

Las cenizas descansan sobre mi cara.
El fuego las altera y escapan.
Volando contra el viento, vuelan
y no paran de hacerlo hasta mi cuerpo.

Cenizas que viajan por un camino
lleno de espinas que se clavan.
Las nubes han pasado y no han parado.
No han descargado la sabiduría perdida.

Mi tierra quiere florecer.
Pero no la dejan renacer.
Mi vida viaja en el tiempo para
revivir viejos momentos.

Las colinas del norte quieren beber,
necesitan del líquido transparente;
el que nos da la vida, sin él imposible
crecer, imposible vivir con una sonrisa.

Muchas estrellas en este amanecer.
Soñando que puedo volar, siento con
los ojos cerrados que puedo caminar,
siento dominar mi vida, mi tierra.

Mi tierra está muerta, falta de agua.
Falta de verde en el campo acalorado.
Mi tierra está asfixiada por las llamas.
Falta de flores sobre el manto quebrado.

Eres la belleza en persona. La damisela
con cabellos dorados y blusa blanca.
Llegas constantemente a mis sueños.
Eres la reina de mi alborada.

Solo tú puedes calmar esta ansiedad.
Tus pasos aniquilan mi tranquilidad.
Pesadillas que no me dejan respirar.
Cuando sueño solo quiero besar esos
labios vivos, que me hacen olvidar.

Mi tierra quiere florecer.
Pero no la dejan renacer.
Mi vida viaja en el tiempo para
recordar esta antigüedad.

Más allá puedo ver el camino.
Puedo distinguir los llantos.
Las lágrimas de estos seres vivos.

2 comentarios:

maggie dijo...

Muy bello, pero me surge una duda... es sólo una obra literaria o denuncia una triste verdad???, está lleno de melancolía y sentimiento.
Besitos. Maggie.

Frank Román dijo...

Pues cuando lo escribi no pensé en nada especial, solo me puse a escribir y a liberar mi imaginacion, y sacar todos los pensamientos que llevo dentro. Se puede entender como una autocritica a esta vida llena de sufrimientos, no solo para nosotros, sino para el medio que nos rodea. Y eso es una verdad como un templo. Tambien se puede entender como una pequeña historia. Besos amiga.