lunes, 10 de marzo de 2008

Belleza dorada

La chiquita del lago.

dispone de unos largos

cabellos dorados.


Sale a pasear todas

las noches enamoradas.

Con una seda blanca.


Que cubre desde su

pecho hasta su rodillas.

y en medio un cordón

engalanado, pomposo,

muy sofisticado.


Con unas manos suaves.

Una piel suculenta.

Sin la protección de

su caballero andante.


Se detiene a observar,

a mirar, a contemplar,

tan estrepitoso paisaje.


Con una lanza en su mano.

Dispuesta a que llegue

el día para combatir,

como una gata salvaje.


Por la noche sombría,

con belleza interesante.

Por el día un animal

capaz de envenenar.


Capaz de atravesar

almas que la quieren

atrapar, coger, agarrar.


Todas las noches

suele deambular

sin pena ni gloria.


Vagabunda en vida.

Caminante de la

eternidad sin fin.

2 comentarios:

Unknown dijo...

Quiero encerrar en este poema mi comentario a todos los anteriores, son en verdad una belleza dorada la que has escrito y de nuevo has conquistado un corazón triste y golpeado por la vida...
Gracias amigo. besitos.
Maggie

Unknown dijo...

Quiero encerrar en este poema mi comentario a todos los anteriores, son en verdad una belleza dorada la que has escrito y de nuevo has conquistado un corazón triste y golpeado por la vida...
Gracias amigo. besitos.
Maggie