Una brisa de otoño fugaz.
Hojas que caen y se quiebran.
Rayos de luz que me colorean.
Un papel rugoso y perspicaz.
El viento airea la cortina roja.
Revestida de estrellas esmeralda.
Bordada por eras mitológicas.
Esculpida por sueños fantasiosos.
He visto una estrella pasear.
Contemplar mi ventana al pasar.
Con su liga quemaba mi brillo.
El amarillo de mis ojos cautivos.
Aires que crean una seducción.
Bordean una figura desierta.
Las palabras se las lleva tu fuego.
Quemándolas en mi cuerpo.
Cortejé a tu mirada tartamuda.
Que no podía hablar siquiera.
La canté con mi ternura.
Palabras rellenas de dulzura.
Hojas que caen y se quiebran.
Rayos de luz que me colorean.
Un papel rugoso y perspicaz.
El viento airea la cortina roja.
Revestida de estrellas esmeralda.
Bordada por eras mitológicas.
Esculpida por sueños fantasiosos.
He visto una estrella pasear.
Contemplar mi ventana al pasar.
Con su liga quemaba mi brillo.
El amarillo de mis ojos cautivos.
Aires que crean una seducción.
Bordean una figura desierta.
Las palabras se las lleva tu fuego.
Quemándolas en mi cuerpo.
Cortejé a tu mirada tartamuda.
Que no podía hablar siquiera.
La canté con mi ternura.
Palabras rellenas de dulzura.
1 comentario:
Agradezco las palabras bellas hacia lo que escribo.
Tu también escribes muy bonito y con mucho sentimiento me hace pensar en tantas cosas en la vida, la naturaleza, los sentimientos, la fuerza, ...
Nos estaremos visitando Ok.
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