Siento tu cuerpo.
Tus lágrimas dentro.
Tu piel susurrando
las heridas de mis senos.
Acaríciame, siénteme.
Deslízate sobre mi ser.
Enloquéceme otra vez.
Déjame florecer.
Quiero ser única.
Tú única mujer.
Quiero ser una rosa.
Rosa en el anochecer.
Escúrrete sobre mi piel.
La sangre quiero ver.
Recorrer y estremecer.
Los dedos de mis pies.
Mis uñas se agarran.
Se quedan manchadas
de savia perenne.
Blanca y asustada.
Este corsé me sostiene.
Tus lazos aprietan fuerte.
No me dejes caer.
Siénteme, siente mi deseo.
Tus lágrimas dentro.
Tu piel susurrando
las heridas de mis senos.
Acaríciame, siénteme.
Deslízate sobre mi ser.
Enloquéceme otra vez.
Déjame florecer.
Quiero ser única.
Tú única mujer.
Quiero ser una rosa.
Rosa en el anochecer.
Escúrrete sobre mi piel.
La sangre quiero ver.
Recorrer y estremecer.
Los dedos de mis pies.
Mis uñas se agarran.
Se quedan manchadas
de savia perenne.
Blanca y asustada.
Este corsé me sostiene.
Tus lazos aprietan fuerte.
No me dejes caer.
Siénteme, siente mi deseo.
1 comentario:
UUUUUffffffff amigo, qué poema más sensual... ojalá todos los hombres fueran así. Besitos amigo.
Maggie
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